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Si cree que su hijo muestra signos de TDAH, realice este rápido test para ver si sus características son similares a las de los niños autistas.
Aquí tiene una lista de preguntas sobre experiencias vitales que son comunes entre los niños diagnosticados de trastorno del espectro autista (TEA). Lea atentamente cada pregunta e indique con qué frecuencia su hijo ha experimentado los mismos problemas o similares en los últimos meses.
Tenga en cuenta que algunos comportamientos son propios del desarrollo de su hijo pequeño y no son signos de autismo. Esta prueba NO es una herramienta de diagnóstico. Los trastornos mentales sólo pueden ser diagnosticados por profesionales sanitarios autorizados.
El Cociente del espectro autista-Versión infantil (AQ-Niño) es un cuestionario de referencia para los padres diseñado para cuantificar los rasgos autistas en niños de 4 a 11 años. El intervalo de puntuaciones del AQ-Niño es de 0-150. -
El Cociente del Espectro Autista-Versión Infantil (AQ-Niño) es un cuestionario informado por los padres diseñado para cuantificar los rasgos autistas en niños de 4 a 11 años. El intervalo de puntuaciones del AQ-Niño es de 0-150.
El AQ evalúa síntomas que han demostrado ser indicativos de los dominios de lectura mental, atención al detalle, habilidades sociales e imaginación del autismo. El AQ niño fue diseñado por Carrie Allison, Bonnie Auyeung y Simon Baron-Cohen, este test se utiliza habitualmente para diagnosticar el trastorno del espectro autista (TEA) en niños. Sólo un profesional de la salud mental puede diagnosticar el autismo. Pero si busca un test de autismo en línea, la prueba de síntomas puede ayudarle a averiguar si los comportamientos que observa en su hijo pueden ser signos de autismo o de otra cosa. -
¿Cuáles son los signos del autismo?
Para identificar indicadores de autismo en distintos grupos de edad, incluidos bebés, niños pequeños y adolescentes, considere la posibilidad de utilizar el comprobador de síntomas gratuito.
El autismo, conocido como un trastorno del espectro, incluye una amplia gama de síntomas, funciones cognitivas, capacidades lingüísticas y comportamientos en los niños, que van desde los no verbales hasta los muy comunicativos. A pesar de esta diversidad, ciertos síntomas comunes del autismo se observan en todo este espectro.
Estos síntomas se clasifican a grandes rasgos en dos grupos: dificultades en la comunicación social y comportamientos restrictivos y repetitivos (RRB). Los RRB implican movimientos físicos repetitivos o patrones de comportamiento que limitan la interacción del individuo con su entorno.
Los rasgos de ambas categorías son evidentes en los niños con autismo desde una edad temprana, incluyendo la infancia y la niñez. Pueden detectarse signos de autismo en bebés de tan sólo 1 año, mientras que las señales suelen ser evidentes en niños de 2 a 4 años.
Los signos de problemas de comunicación social en bebés y niños pequeños menores de 3 años incluyen
- No responder a su nombre
- Falta de interés por compartir o mostrar objetos
- Resistencia a los gestos de afecto
- Ausencia de gestos comunicativos
- Prefieren jugar solos
- Ausencia de habla hasta los 18 meses
- Incapacidad para formar frases de dos palabras a los 2 años de edad
Para los niños mayores, los retos sociocomunicativos del autismo incluyen:
- Dificultades para entablar una conversación recíproca
- Evitación del contacto visual
- Dificultades para utilizar e interpretar el lenguaje corporal
- Retos para reconocer y responder a las emociones de los demás, desenvolverse en situaciones sociales y comprender las relaciones sociales
- Aversión a los gestos afectuosos
- Prefiere el juego solitario
Los signos de comportamientos repetitivos y restrictivos incluyen
- Repetición constante de acciones
- Atención excesiva a detalles menores
- Atención excesiva a los detalles
- Obsesión por temas u objetos específicos
- Ansiedad ante pequeños cambios en la rutina
- Sensibilidad inusual a los estímulos sensoriales
¿Qué define el autismo de alto funcionamiento?
Se suele decir que las personas con autismo que no presentan trastornos cognitivos tienen un autismo de alto funcionamiento. Pueden ser muy verbales, tener éxito académico y profesional y demostrar una inteligencia o un talento excepcionales. Sin embargo, pueden experimentar dificultades significativas en la comunicación social, tener dificultades con los cambios de rutina y una mayor sensibilidad a los estímulos sensoriales. También se les denomina "neurodiferenciados", lo que indica una función cerebral que se desvía del desarrollo típico o "neurotípico".
¿Cuándo es posible evaluar a un niño por autismo?
Pueden observarse signos de autismo en niños a partir de los 12 meses, y estos signos se acentúan con la edad. Un diagnóstico profesional se considera fiable a partir de los 2 años, aunque a menudo los diagnósticos se realizan más tarde, durante la infancia, la escuela primaria o la adolescencia.
¿Cómo se evalúa a un niño pequeño para detectar el autismo?
El proceso de evaluación del autismo suele comenzar con un cuestionario de detección. Si el cuestionario indica la posibilidad de autismo, le sigue una evaluación exhaustiva que incluye la observación del juego, el comportamiento y la comunicación del niño.
Una evaluación exhaustiva también incluye conversaciones con los padres, profesores y otras personas que conozcan al niño, así como evaluaciones cognitivas estructuradas para comprender los procesos de pensamiento del niño e identificar apoyos educativos beneficiosos.
¿Quién está cualificado para evaluar a un niño por autismo?
Aunque un pediatra puede realizar la exploración inicial, la evaluación detallada debe realizarla un profesional formado en el diagnóstico del autismo. Esto es vital porque la interpretación de los síntomas, sobre todo en niños pequeños, puede ser compleja. Por ejemplo, la falta de contacto visual en un bebé o un niño pequeño puede indicar autismo o ser simplemente un signo de timidez.
Copyright
B. Auyeung, S. Baron-Cohen, S. Wheelwright and C. Allison, (2008)
The Autism Spectrum Quotient: Children’s Version (AQ-Child)
Journal of Autism and Developmental Disorders
ESTA INFORMACIÓN NO PRETENDE SUSTITUIR EL JUICIO CLÍNICO NI GUIAR EN MODO ALGUNO EL CUIDADO INDIVIDUAL DEL PACIENTE.