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¿Qué-es-el-trastorno-de-oposición-desafiante?

¿Qué es el trastorno de oposición desafiante?

Que un niño interrumpa accidentalmente la clase mientras habla con un amigo es algo normal. Que esa misma persona grite en medio de una clase y actúe descaradamente contra su profesor es un problema totalmente distinto que probablemente sea señal de algo más grave.

Si esos comportamientos se convierten en un patrón, es posible que su hijo padezca un trastorno negativista desafiante u TOD. Mientras que muchos niños arremeten contra los demás de vez en cuando, los que padecen TOD lo hacen sin cesar. Es problemático hasta el punto de que puede alterar todas las facetas de su vida.

Entonces, ¿cuáles son los rasgos comunes del trastorno negativista desafiante y cómo encontrar el apoyo de salud mental adecuado?

Todos los niños son reactivos, sobre todo cuando están cansados, hambrientos, estresados o disgustados. Pueden contradecir, replicar y desafiar a sus padres, profesores y otros adultos.

El comportamiento de oposición es una parte normal del desarrollo de los niños desde los dos o tres años hasta los primeros años de la adolescencia. Sin embargo, el comportamiento desafiante, poco colaborador y hostil se convierte en un serio motivo de preocupación cuando es tan frecuente y constante que destaca en comparación con otros niños de la misma edad y nivel de desarrollo y cuando interfiere en la vida social, familiar y académica del niño.

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 El trastorno negativista desafiante es un tipo de trastorno del comportamiento que se diagnostica en la infancia. Como su nombre indica, los niños con TOD son desafiantes y pueden mostrarse hostiles con todos los que les rodean. Son los alumnos que siempre se meten en líos a pesar de los numerosos intentos de enseñarles las consecuencias de sus actos.


El Trastorno Oposicionista Desafiante (TOD) es un trastorno del comportamiento que conduce a la desobediencia y la ira contra las figuras de autoridad y puede afectar a la vida personal, el rendimiento escolar y la vida social de una persona.

Aunque el TOD presenta síntomas similares a los de otros trastornos, es diferente a ellos. A muchos niños con TOD se les diagnostica TDAH debido a su tendencia a evitar el trabajo o permanecer sentados. Una de las principales diferencias es que los médicos pueden tratar los síntomas del TDAH con medicación, mientras que el TOD requiere una amplia formación y terapia.

Algunos niños con TOD acaban superando el trastorno. Sin embargo, alrededor de un tercio de ellos acaban desarrollando un trastorno de la conducta que puede convertirse en un trastorno de la personalidad. 

Rasgos del TOD

Los niños con TOD tienen un patrón de comportamiento hostil continuo que limita su funcionamiento cotidiano. No es tan sencillo como que hagan caso omiso de las instrucciones o se nieguen a hacer las tareas de clase.

Un niño con trastorno negativista desafiante tendrá frecuentes rabietas y discutirá constantemente con los adultos. Cuestionan las normas y se niegan a cumplirlas. En algunos casos, puede actuar deliberadamente de forma que moleste a los que le rodean.

El niño con TOD puede molestarse o enfadarse con facilidad. Puede hablar de forma grosera o rencorosa. Si cree que se le ha castigado injustamente o incluso que se le ha menospreciado, puede buscar venganza.

Los síntomas del TOD se observan con más frecuencia en casa o en la escuela debido a la naturaleza de estos entornos.  

Síntomas de trastorno de oposición desafiante : 

  • Frecuentes ataques de ira
  • Conflictos frecuentes con los adultos
  • A menudo desafía las normas
  • Desafío activo y negativa a cumplir las peticiones y normas de los adultos
  • Intentos deliberados de molestar o enfadar a la gente
  • Culpa a los demás de sus errores o mal comportamiento
  • A menudo está irritable o se molesta fácilmente con los demás
  • A menudo pierde los nervios o tiene arrebatos de ira
  • Cuando se enfada hace daño
  • Utiliza mentiras para que le crean
  • Actitud hostil y vengativa
  • Actitud hiriente hacia los demás y se enfada cuando otros lo molestan
  • Estado de ánimo negativo

Los síntomas suelen presentarse en diversos entornos, pero pueden ser más notorios en casa o en la escuela.

¿Cuáles son las causas del TOD en los niños?

Entre el 1 y el 16% de los niños y adolescentes en edad escolar son diagnosticados de TOD. Se cree que la interacción entre la predisposición genética y los factores ambientales puede conducir a la aparición de los síntomas.

Es más frecuente en niños que en niñas y suele coexistir con el trastorno por déficit de atención, los trastornos de ansiedad y los trastornos del comportamiento.

Al igual que muchos trastornos mentales de los adolescentes, se desconoce la causa exacta del TOD. Sin embargo, las investigaciones sugieren que se debe a una combinación de factores biológicos, genéticos y ambientales.

Existen dos teorías principales sobre cómo un niño puede desarrollar el trastorno negativista desafiante: la teoría del desarrollo y la teoría del aprendizaje.

La teoría del desarrollo sugiere que los problemas comenzaron cuando el niño aún era pequeño. La idea es que estos niños tenían problemas para aprender a ser independientes de sus padres y actuaban como una forma de llamar su atención.

La teoría del aprendizaje sugiere que los síntomas negativos del TOD son el resultado de conductas aprendidas. En otras palabras, son el resultado de los métodos de refuerzo negativo utilizados por sus padres. Reflejan su entorno y actúan porque ven que otras personas en su vida reaccionan así.

Es probable que sea el resultado de una combinación de ambas cosas, porque la mayoría de los niños con TOD lo superan en cierta medida. Eso sugiere que, a medida que se desarrollan y aprenden, empiezan a arraigar nuevos comportamientos. 

Factores de riesgo extraños

Química cerebral: El TDAH se ha relacionado con ciertos tipos de sustancias químicas cerebrales, o neurotransmisores, que no funcionan correctamente. Los neurotransmisores ayudan a las células nerviosas del cerebro a comunicarse entre sí. Si estas sustancias químicas no funcionan correctamente, es posible que los mensajes no lleguen bien al cerebro, lo que provoca los síntomas del trastorno y otras enfermedades mentales. Además, muchos niños y adolescentes con trastorno negativista desafiante (TOD) también padecen otras enfermedades mentales, como trastorno por déficit de atención (TDAH), trastornos del aprendizaje, depresión o trastorno de ansiedad, que pueden contribuir a sus problemas de conducta.

Otras diferencias cerebrales: Algunos estudios demuestran que los daños o lesiones en determinadas áreas del cerebro pueden provocar graves problemas de conducta en los niños.

El temperamento: Los niños que tienen dificultades para controlar sus emociones son más propensos a padecer TOD.

Antecedentes familiares: Muchos niños y adolescentes con TOD tienen familiares cercanos con enfermedades mentales como trastornos del estado de ánimo, trastornos de ansiedad y trastornos de la personalidad.

Problemas familiares: Cuestiones como una vida familiar disfuncional, el abuso de sustancias y una disciplina incoherente por parte de los padres u otras personalidades pueden conducir al desarrollo de trastornos del comportamiento.

Compañeros: La atención de los compañeros u otras personas a veces puede reforzar los comportamientos del TOD.

Diagnóstico del TOD infantil

trastorno de oposición desafiante El diagnóstico del TOD infantil suele implicar una evaluación exhaustiva por parte de un profesional de la salud mental cualificado, como un psiquiatra o psicólogo infantil. El proceso de diagnóstico puede incluir los siguientes pasos:


Evaluación inicial: El profesional de salud mental llevará a cabo una evaluación exhaustiva del comportamiento del niño, su historial médico y sus antecedentes familiares. También puede entrevistar al niño y a sus padres o cuidadores para recabar información sobre los síntomas y comportamientos del niño.

Evaluación de los síntomas: El profesional de salud mental evaluará los síntomas del niño utilizando criterios de diagnóstico estándar, como el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5). Los criterios del trastorno negativista desafiante (TOD) incluyen un patrón de comportamiento hostil, desafiante y desobediente hacia las figuras de autoridad, que debe persistir durante al menos seis meses.

Excluir otras afecciones: El profesional de salud mental también evaluará al niño para detectar otras afecciones mentales que puedan presentar síntomas similares a los del Trastorno Negativista Desafiante (TOD), como el trastorno de conducta o el TDAH. Esto ayudará a garantizar un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.

Evaluaciones de padres y profesores: El profesional de salud mental también puede obtener evaluaciones de los padres y profesores del niño utilizando cuestionarios estandarizados para proporcionar información adicional sobre el comportamiento del niño en diversos entornos.

Observación del niño: El profesional de salud mental también puede observar el comportamiento del niño en diversos entornos, como en la escuela o en casa, para evaluar los síntomas y el comportamiento del niño.

En general, el diagnóstico del trastorno negativista desafiante (TOD) en la infancia requiere una evaluación y valoración exhaustivas de los síntomas y el comportamiento del niño, así como la consideración de otras posibles afecciones. Es importante buscar un diagnóstico y tratamiento profesional por parte de un profesional de la salud mental cualificado. 

Tratamiento del trastorno negativista desafiante 

El tratamiento se basa en varios parámetros, como la edad del niño, la gravedad de los síntomas y la capacidad del niño para participar en determinados tratamientos y tolerarlos. El tratamiento suele consistir en una combinación de lo siguiente

  • Psicoterapia: El objetivo de este tipo de asesoramiento es ayudar al niño a desarrollar habilidades sociales más eficaces para enfrentarse a los problemas, resolverlos y encontrar formas de expresar y controlar la ira. Un tipo de terapia denominada terapia cognitivo-conductual tiene por objeto volver a desarrollar el pensamiento (cognición) del niño para mejorar su comportamiento.
  • Terapia familiar: Puede utilizarse para ayudar a mejorar las interacciones familiares y la comunicación entre los miembros de la familia. Una técnica de tratamiento especializada denominada entrenamiento en gestión parental (TGP) enseña a los padres formas de cambiar positivamente el comportamiento de su hijo. Los planes de gestión del comportamiento suelen implicar el desarrollo de contratos entre padres e hijos que identifican recompensas para los comportamientos positivos y consecuencias (castigos) para los comportamientos negativos.
  • Medicación: Aunque no existe una medicación formalmente aprobada para tratar el TOD, a veces se pueden utilizar medicamentos para tratar los síntomas (incluyendo la impulsividad y la inestabilidad). A veces, un niño con TOD necesita medicación para otras enfermedades mentales que pueda estar padeciendo, como el TDAH o la depresión.

Gestión del TOD

trastorno de oposición desafiante Entorno familiar - Los padres necesitan apoyo y comprensión. Pueden ayudar a su hijo de varias maneras:

Apoyarse siempre en lo positivo, elogiar al niño y darle refuerzos positivos cuando muestre flexibilidad o cooperación.

Tómese un descanso si va a agravar el conflicto con su hijo. Es un buen modelo para tu hijo. Apóyele si necesita tiempo para evitar reacciones exageradas.

Elija sus batallas. Como al niño le cuesta evitar los conflictos, dé prioridad a las cosas que quiere que haga su hijo.

Establezca límites razonables y apropiados (para su edad) con consecuencias que puedan aplicarse sistemáticamente.

Mantenga intereses diferentes a los de su hijo para que manejarlos no le quite todo su tiempo y energía.

Intente cooperar y obtener el apoyo de otros adultos (profesores, entrenadores y cónyuge) que estén relacionados con su hijo.

Controle su propio estrés con opciones de estilo de vida saludables, como el ejercicio y la relajación. Cuídese.

Cómo afrontar el TOD en el aula

Entorno escolar - Estrategias en el aula para afrontar el TOD.

  • Recordatorio táctico de la comprensión y el respeto del profesor hacia el alumno.
  • Un sistema de recompensas - los alumnos con Trastorno Negativista Desafiante (TOD) responden mucho mejor a las recompensas que a las sanciones.
  • Oportunidades para que el alumno demuestre las habilidades que conoce bien.
  • Cuando cambie el horario o se planifique una actividad diferente, prepare a los niños con TOD por separado.
  • Elogie el comportamiento positivo tanto individualmente como en público para que lo oigan los demás alumnos.
  • Recuérdele al alumno que usted no es la causa de su desdén, sino su válvula de escape.
  • Recuérdese a sí mismo que es humano y que puede necesitar un momento (o más) para calmarse y gestionar su frustración, y que no pasa nada.

Técnicas de crianza para casa

En casa, la lucha es diferente. Aunque no haya otros niños que lo molesten, un niño con TOD puede causar problemas en lugares públicos o gritar en casa.

En caso de discusiones recurrentes, intente encontrar la raíz del problema. Haga cambios en el proceso y mantenga la coherencia. Usa una voz tranquila cuando te comuniques con ellos y explícales por qué es importante seguir la norma.

En general, una crianza eficaz debe incluir una estructura reforzada y el establecimiento de una relación afectiva con tu hijo. También debes pedir su opinión y respetar sus decisiones, aunque no sean necesariamente las que habías planeado para ellos.

Complicaciones del trastorno negativista desafiante (TOD)

trastorno de oposición desafiante El TOD puede dar lugar a diversas complicaciones, que pueden afectar al bienestar social, académico y emocional del niño. Algunas posibles complicaciones del TOD son:
Bajo rendimiento académico: Los niños con Trastorno Oposicionista Desafiante (TOD) pueden tener dificultades con el rendimiento académico debido a su dificultad para seguir normas e instrucciones y desafiar a las figuras de autoridad. Esto puede dar lugar a malas notas y bajo rendimiento académico.

Problemas en las relaciones: El Trastorno Oposicionista Desafiante puede afectar a la capacidad del niño para establecer relaciones positivas con sus compañeros, profesores y otras figuras de autoridad. Esto puede provocar aislamiento social, dificultad para hacer amigos y escasas habilidades sociales.

Problemas de salud mental: Los niños con trastorno negativista desafiante (TOD) corren un mayor riesgo de desarrollar otras enfermedades mentales, como ansiedad, depresión o trastornos por abuso de sustancias. Estos trastornos pueden repercutir aún más en el bienestar emocional y el rendimiento académico del niño.

Trastorno de conducta: los niños con Trastorno Negativista Desafiante (TOD) corren un mayor riesgo de desarrollar Trastorno de Conducta, un trastorno del comportamiento más grave caracterizado por la violación persistente de los derechos de los demás y el desprecio de las normas y las figuras de autoridad.

Conflicto familiar: El Trastorno Negativista Desafiante (TOD) puede causar estrés y conflictos importantes en la familia, ya que el comportamiento del niño puede ser difícil de manejar para los padres y cuidadores. Esto puede conducir a una disfunción familiar y exacerbar aún más los síntomas del niño.

Problemas legales: En algunos casos, el comportamiento del niño puede acarrear problemas legales, como participar en conductas delictivas o meterse en peleas.

Es importante buscar ayuda profesional si su hijo presenta síntomas de TOD, ya que una intervención precoz puede ayudar a prevenir mayores complicaciones y mejorar los resultados.

Upbility posee recursos destinados a ayudar a los adolescentes presentes en su vida. 

Situaciones sociales para adolescentes con trastornos del espectro autista VELOCIDAD DE PROCESAMIENTO | Estrategias de intervención Cómo desarrollar las habilidades sociales | PARTE 4 - SENTIMIENTOS Y SITUACIONES SOCIALES

El pronóstico para las personas con trastorno de provocación enantiómica

El pronóstico para las personas con trastorno de provocación enantiómica (TOD) puede variar en función de la gravedad del trastorno y de la calidad del tratamiento y el apoyo que reciban. Con el tratamiento y el apoyo adecuados, muchas personas con TOD son capaces de controlar sus síntomas y llevar una vida satisfactoria y plena. Sin embargo, sin tratamiento, el TOD puede provocar complicaciones a largo plazo y resultados negativos.

La investigación muestra que la intervención temprana es clave para mejorar los resultados de los niños con TOD. El tratamiento suele incluir una combinación de terapia conductual, educación de los padres y medicación si es necesario. La terapia conductual puede ayudar al niño a aprender a manejar sus emociones y mejorar sus habilidades sociales e interpersonales, mientras que la educación de los padres puede ayudar a los padres y cuidadores a aprender estrategias eficaces para manejar el comportamiento de su hijo y proporcionarle apoyo. En algunos casos, puede utilizarse medicación para controlar los síntomas de otras afecciones coexistentes, como el TDAH o la ansiedad.

Aunque el trastorno negativista desafiante (TOD) puede suponer un reto tanto para la persona que lo padece como para sus familiares, con el tratamiento y el apoyo adecuados, muchas personas con TOD son capaces de superar sus síntomas y llevar una vida satisfactoria y plena. Es importante buscar ayuda profesional si usted o un ser querido experimenta síntomas de TOD, ya que una intervención temprana puede mejorar los resultados y evitar complicaciones posteriores.

Prevención del trastorno antisocial desafiante (TOD)

No hay ninguna forma garantizada de prevenir el trastorno negativista desafiante (TOD), ya que las causas exactas del trastorno no se conocen del todo. Sin embargo, existen algunas estrategias que pueden ayudar a reducir el riesgo de TOD o a prevenir su aparición. He aquí algunas posibles estrategias de prevención:

Crianza positiva: Una crianza coherente y positiva puede ayudar a reducir el riesgo de TOD. Esto incluye establecer límites y expectativas claros, utilizar el refuerzo positivo para fomentar el buen comportamiento y proporcionar apoyo emocional al niño.

Intervención precoz: La identificación y el tratamiento precoces de los problemas de conducta de los niños pequeños pueden ayudar a prevenir el desarrollo del TOD. Esto puede incluir la búsqueda de ayuda profesional si el niño muestra desobediencia o desafío persistentes, agresividad u otros comportamientos problemáticos.

Abordar los conflictos familiares: Abordar los conflictos familiares y proporcionar apoyo emocional al niño puede ayudar a prevenir el desarrollo del TOD. La terapia familiar puede ayudar a mejorar la comunicación y reducir los conflictos dentro de la familia.

Crear un entorno familiar positivo: Un entorno familiar positivo, estable y enriquecedor puede ayudar a prevenir el desarrollo del TOD. Esto puede incluir proporcionar al niño un entorno seguro y de apoyo, reducir el estrés en el hogar y garantizar que el niño tenga acceso a modelos de conducta positivos y apoyo social.

Es importante tener en cuenta que, si bien estas estrategias pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar el TOD, pueden no ser eficaces para todos los niños. Además, es importante buscar ayuda profesional si su hijo presenta problemas de conducta persistentes, ya que una intervención temprana puede ayudar a prevenir complicaciones mayores y mejorar los resultados. 

Cuándo deben los padres pedir ayuda inmediatamente

Debe llamar inmediatamente al especialista que vigila al niño o adolescente cuando :

  • Se sienta gravemente deprimido, asustado, extremadamente ansioso o enfadado consigo mismo o con los demás.
  • Se sienta fuera de control
  • Oye voces que los demás no oyen
  • Ve personas y situaciones que los demás no ven
  • No puede dormir ni comer durante 3 días seguidos
  • Tiene un comportamiento que preocupa a amigos, familiares, profesores
  • Si manifiesta tendencias o pensamientos suicidas

Encontrar servicios de salud mental

No hay ninguna forma garantizada de prevenir o tratar el trastorno negativista desafiante. El médico de tu hijo no puede recetarte un medicamento que ponga fin a su mal comportamiento. Sólo la crianza positiva y el tratamiento pueden ayudar a mejorar su comportamiento antes de que empeore.

Busca un terapeuta especializado en el tratamiento del TOD. También puedes comprar en Internet libros electrónicos sobre gestión del comportamiento para ayudar a tu hijo a desarrollar sus habilidades sociales, regular sus emociones y desarrollar la empatía. También puede haber grupos de apoyo para padres en tu zona o en Internet a los que merezca la pena unirse.

Mejore sus habilidades de apoyo a la salud mental

Incluso los mejores profesionales de la salud mental pueden tener dificultades para controlar los síntomas del trastorno negativista desafiante. Después de todo, un niño con TOD desafiará todas las normas y expectativas establecidas por una figura de autoridad. Por suerte para ellos, hay mucho material en Internet que puede ayudarles.

Upbility ofrece material en varias áreas, como educación especial, dificultades de aprendizaje, comportamiento y lenguaje. También puedes buscar nuestros materiales por función si eres logopeda, psicólogo o trabajas en otro campo. Póngase en contacto con nosotros para obtener más información sobre nuestros productos o si tiene alguna pregunta. 

Alice Kassotaki - Logopeda MSc, BSc

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